El Centro Editorial Valtortiano – CEV rubricado – fue creado en 1985 por Emilio Pisani, hijo de Michele Pisani (1896-1965), quien fue el primer editor de Maria Valtorta (1897-1961).
En los artículos de asociación leemos que el CEV tiene «el objetivo específico y prioritario de desarrollar, documentar y difundir el conocimiento de María Valtorta en la persona, en los escritos y en los ideales: en la persona, a través de la investigación histórico-documental, la recopilación de testimonios, la conservación de las cosas que te pertenecían, la protección de tu nombre y tu memoria, las iniciativas para imponerte en el ámbito civil, cultural y eclesial; en los escritos, a través de la impresión y la venta de obras literarias y de toda documentación de Ella y sobre Ella, tanto en el idioma italiano como en las traducciones; en ideales, a través de la difusión de la instrucción religiosa, especialmente bíblica, en el sentido católico «.
El CEV tiene su sede en la Isola del Liri, una ciudad agradable en Lazio, en el centro de Italia, que debe su nombre al río Liri, que se divide detrás de un antiguo castillo, fluye río abajo formando dos cascadas y vuelve a unirse. sus ramas después de haber abrazado el núcleo de la ciudad.
Las aguas del río favorecieron a las fábricas de papel que, a principios del siglo XIX, algunos empresarios franceses, a raíz de Joachim Murat, elegido rey de Nápoles por Napoleón Bonaparte, querían instalarse en el territorio de la isla, que se convirtió en uno de los centros más importantes. Europeos para la producción de papel, junto con la industria del papel y el fieltro.
En el siglo siguiente también floreció la producción de libros de una imprenta, que imprimió principalmente en nombre de institutos religiosos y congregaciones romanas.
De este modo, su propietario, Michele Pisani, pudo conocer el trabajo manuscrito de Maria Valtorta y convertirse en su valiente editorial.
El CEV, que es su rama Valtortian que se ha convertido en un árbol, nació de esa imprenta. Considerado como uno de los editores exportadores que cada año recibe un premio del Ministerio de Patrimonio Cultural, el CEV también ha obtenido, en varias ocasiones desde 1995, el Premio de Cultura de la Presidencia del Consejo de Ministros.